A Veces

A veces, y solo a veces, pienso que es lo que realmente quiero hacer conmigo

¿A que dedicarme?

¿Por quién jugarme?

O que hacer con todo esto poco que construí, bien o mal, desde un principio

Cuando me siento a escribir con una taza de té en la mano y miro por una ventana neoyorquina inexistente pero bien construida con ladrillo, me pregunto si alguna vez esa ventana va a estar ahí de verdad, si de repente cuando me gire, sea porque alguien abre la puerta, y viene a abrazarme por detrás a darme el verdadero beso

Insisto siempre con lo del beso, y tal vez sea mi no maduración interna la que no deje ver algo más que un verdadero beso

Mientras hablaba el otro día con un alguien, para llamarlo de alguna manera, me dijo que odiaba las películas románticas porque el amor no era mágico francés y feliz…

Tal vez sea cierto… tal vez no dejamos que eso exista…o no nos permitimos verlo…

Cuando me siento como hoy enfrente de mi maquina y espero algún que otro llamado de emergencia, pienso en cada una de esas pequeñas y escasas personas que dieron tanto por mi

Ellos saben quiénes son, especialmente uno. Y también saben, o sienten, mejor dicho, algún odio extremo hacia mi persona.

Todavía no logro comprender como puedo llegar a hacer las cosas que hago

Ni porque actúo de ciertas maneras que no son las mas correspondientes a mi verdadera persona.

Sé que todas estas palabras sueltas que largo por acá, no son más que ideas que dan vueltas, y que no ayudan, sino que entorpecen mis ya marchitas relaciones arruinadas por un solo culpable…o sea…el que escribe en cuestión.

Me detengo durante dos segundos porque Juana interrumpe mientras canta alguna que otra canción en español que dispersa mi mente acabezada

No sé de qué manera seguir, actuar, ejercer derechos, progresar, mejorar, mirar para adelante, ver mi estabilidad desafiante balancearse

Lo único que puedo decir, hoy en día, es que solo conmigo y sin terminar de seguir viendo al resto

SALVESE QUIEN PUEDA.